Chanel ha sido durante mucho tiempo sinónimo de elegancia atemporal y sofisticación innegable. Sin embargo, la marca icónica parece estar reinventándose en la colección Primavera-Verano 2024 Ready to Wear, bajo la dirección creativa de Virginie Viard, quien ha logrado fusionar la esencia clásica de Chanel con una nueva visión de la moda, una visión que destila libertad y movimiento, inspirada en los jardines de la villa Noailles y en el espíritu hippie de los años 60 y 70.
A diferencia de su predecesor, Karl Lagerfeld, conocido por sus deslumbrantes escenarios, Viard ha optado por poner el énfasis en el diseño en sí mismo, en una colección que celebra la sencillez y la pureza de líneas. La tela icónica de Chanel, el tweed, se hace presente en varias de las piezas, pero con un giro moderno y relajado.
La colección Primavera-Verano 2024 de Chanel se presenta como una oda a la libertad y al movimiento, y esto se refleja claramente en la elección de las prendas. Maxivestidos lánguidos con cuellos en V profundos, chaquetas cuadradas lanzadas sobre conjuntos cortos y con estilo con vaqueros, y trajes de falda con cuellos y bolsillos de lentejuelas, dan vida a una moda que permite la comodidad sin sacrificar el estilo.
Viard encuentra su inspiración en los jardines de la villa Noailles, una casa modernista temprana en las montañas cerca de Hyères, Francia. Con líneas simples y puras, la arquitectura en sí misma sirvió para influir en la sensación cotidiana de la colección. Las rayas también se hacen presentes en diferentes piezas, desde faldas largas hasta suéteres usados sobre las faldas, creando un contraste interesante con el tweed.
En cuanto a los accesorios, Chanel no decepciona. Los collares de todas las longitudes están en capas, y la mini bolsa de solapa se enfatiza en toda la colección. Las diademas hacen un regreso triunfal, al igual que los pendientes gruesos con el logotipo de Chanel y las grandes bolsas que añaden un toque de extravagancia.
Los vestidos con flores, como pintados en acuarelas, son una verdadera delicia para la vista. Vestidos fluidos en forma de caftán y suéteres usados sobre las faldas aportan una sensación de frescura y feminidad a la colección. El rosa, en todas sus tonalidades, desde el polvoriento hasta el saturado, se convierte en el color estrella, pero Chanel también juega con el blanco y negro, incorporando toques de azul en botas de cuero que sorprenden y fascinan.
Una de las sorpresas más destacadas de la colección es el regreso de las ballerinas, cómodas y elegantes al mismo tiempo, mostrando que la comodidad no está reñida con el estilo en el universo de Chanel.
En resumen, la colección Primavera-Verano 2024 de Chanel es un testimonio de la visión fresca y libre de Virginie Viard, que reinventa la marca sin perder su esencia clásica. Es una propuesta que celebra la elegancia, la libertad y la feminidad en un equilibrio perfecto entre los años 60’s y 2000. Chanel sigue siendo la marca que todos conocemos y amamos, pero con un nuevo brillo y un espíritu renovado.
La nueva Carolina Herrera por Wes Gordon, colección Primavera – Verano 2024